Hay diferentes formas de aprovechar la gamificación educativa para mejorar el rendimiento en el área académica. Esto se logra incentivando al estudiante a través de un contexto de juego y recompensándolo por alcanzar metas y mostrar resultados positivos. Es una buena forma de motivar tanto a los adultos como a los niños cuando se trata de mejorar el aprendizaje.
Antes de profundizar en cómo la gamificación puede aportar al sector educativo, es importante conocer su función. Consiste en una herramienta que traspone los mecanismos propios de los juegos al ámbito del aprendizaje online, con el objetivo de mejorar el rendimiento académico. Existen estudios que confirman cómo la gamificación puede contribuir a desarrollar nuevas habilidades y comprender más fácilmente lo aprendido.
Gracias a la apariencia entretenida de este modelo educativo, los estudiantes se involucran con el contenido de una forma eficaz y al mismo tiempo divertida. Está demostrado que los individuos se comprometen más con la materia cuando se les presenta a través del juego. Además, surgen sentimientos de satisfacción y logro.
Gamificar una materia no significa necesariamente crear un juego para ello. Más bien, se puede hacer uso de perspectivas como obsequios por cumplir metas, haciendo usos de tablas de puntuación, entre otros conceptos.
Hay varias opciones si se quiere aplicar estas herramientas a un plan formativo en plataformas virtuales. Puedes realizar desde clasificaciones hasta desafíos específicos con niveles diferentes interconectados por puntuaciones.
Si no estás familiarizado con esta técnica, puede resultarte un poco extraña, incluso puede que hasta fuera de lugar o absurda. Pero la palabra juego no debe confundirte, ya que nos referimos a mecanismos para hacer un contenido más ameno. Eso no altera al propio contenido ni le resta seriedad alguna.
Utiliza la gamificación educativa para motivar a tus estudiantes
La gamificación educativa se emplea como una herramienta de motivación para mejorar el rendimiento de los estudiantes. Esto consiste en añadir elementos de juegos a las actividades didácticas, así como premios y recompensas, para alentarles a desempeñarse mejor en sus estudios.
La gamificación es una forma de motivar a los alumnos para que se involucren en el proceso de aprendizaje mediante la creación de un afán por competir y superarse. Además, también se refuerza la importancia del trabajo en equipo para lograr un objetivo común. Por otra parte, hay otras metodologías que buscan incentivar al alumnado mejorando su ranking.
A continuación, te contamos algunos de los principales usos de la gamificación educativa en el entorno del aprendizaje online:
- Fomentar la colaboración y la interacción: una manera efectiva de promover la unión entre los estudiantes es a través del juego. Esto les permite tanto colaborar como competir. Esto logra que las personas se sientan conectadas al compartir una experiencia común; por lo tanto, el juego no sólo sirve para educar, sino para acercar a diferentes individuos.
- Inculcar liderazgo: Los juegos de gamificación ayudan a reunir a los líderes y descubrir quiénes son, y también sirven para educar a aquellos que quieran desempeñar un papel de líder. El camino al liderazgo implica el desarrollo de habilidades como autonomía, iniciativa y responsabilidad hacia un grupo o equipo. Así, algunas dinámicas de juego están específicamente diseñadas para instruir a los participantes sobre cómo ser un buen líder.
- Solucionar problemas de aprendizaje: La gamificación educativa ayuda a personas con dificultades de atención o para el aprendizaje. Reutilizando mecanismos empleados en los juegos, esto puede reducir las distracciones y prevenir otros problemas. Esto es particularmente útil para mantener la atención de aquellos que son propensos a despistarse.
Usos de la gamificación educativa en la formación de las empresas
La gamificación educativa tiene muchos usos dentro del ámbito laboral, permitiendo a los empleados desarrollar su capacidad de aprendizaje. Esta estrategia incluye la implementación de juegos para motivar y proporcionar un ambiente divertido mientras se adquieren habilidades importantes para el trabajo.
La formación continua es una de las mejores maneras de fortalecer la relación entre empleados y empresas. Esto se logra cuando los trabajadores adquieren nuevas habilidades para desarrollar sus potenciales al máximo. De esta manera, se sienten útiles dentro de la empresa y ven que están creciendo junto con la organización. Por ello, aplicar un proceso de gamificación mejora la productividad en las empresas.
La gamificación se ha convertido en una tendencia en las empresas, ya que les permite mejorar la motivación y productividad de los empleados. Es evidente puesto que mediante esta técnica, se agrega un elemento de diversión, lo que ayuda a mantener el nivel de compromiso en el trabajo.
Los ejercicios de simulación para mejorar la excelencia en el trabajo son beneficiosos, especialmente cuando toman forma de concurso con recompensas. Esta es una práctica fácil de personalizar para satisfacer los requerimientos específicos del desempeño laboral.
Para darle un toque novedoso a la presentación de un tema se le puede agregar algunos juegos entre los trabajadores que interactúen con ellos. Esto hará que aquellos que se encuentran presentes sean parte del proceso, además de involucrarse y vivir la experiencia desde dentro. Si cada participante cumple con el papel asignado, esto garantizará mayor éxito; si no hay un rol distribuido para todos, será solamente un espectador más.
La gamificación puede ser una excelente herramienta para curar el estrés. Esto se consigue al crear un ambiente propicio para la adquisición de conocimientos en el que no existan consecuencias desfavorables.
Cómo mejorar la interacción con el entorno utilizando el juego
La gamificación educativa ayuda a mejorar la interacción de los alumnos con el mundo les rodea. Esto puede tener muchos beneficios a la hora de la adquisición de nuevos conocimientos. Aprovechar los videojuegos para que los estudiantes tengan una perspectiva más cercana con lo que sucede en el mundo real es muy beneficioso.
Se puede considerar como algo paradójico afirmar que la gamificación puede ayudar a los estudiantes a conectarse con el mundo real. Esta es una práctica que se lleva a cabo en el mundo virtual, y, por lo tanto, no es físicamente tangible.
La intención principal sobre el uso de la gamificación es entender que todos los conocimientos y habilidades desarrolladas en el ámbito online se pueden aplicar al mundo real. Por esta razón, recurrir a este método puede resultar relevante para acercarse a la realidad.
Existen una gran cantidad de juegos que simulan situaciones de la vida real para proporcionar a los jugadores un desafío. Por ejemplo, hay juegos de estrategia basados en la administración de recursos y en cómo invertirlos para obtener mejoras. Si bien algunos juegos pueden ser costosos, existe una amplia gama de ellos que se pueden adaptar a distintas necesidades. Al permitir que los alumnos lleven un registro sobre lo aprendido, se estimula el desarrollo de su pensamiento crítico.
Al usar la gamificación en el aula, los estudiantes tienen la oportunidad de sentirse como héroes al ser capaces de fijar objetivos y ganar experiencia con el fracaso y vencer desafíos. Estas técnicas pueden tener grandes repercusiones en el desarrollo personal de los jóvenes.
Si hay algo que hemos aprendido en nuestra experiencia impartiendo talleres de robótica educativa, es que la gamificación aporta un beneficio en la educación. Aporta a los estudiantes la posibilidad de aprender con más interés y motivación.
0 comentarios